La obesidad y el sobrepeso se relacionan linealmente con una calidad de vida disminuida.
Dependiendo del grado de obesidad se pueden presentar limitaciones físicas, tales como fatiga y dolor en ciertas partes del cuerpo. Los grados de obesidad aumentados pueden limitar la vida diaria de los pacientes afectados, desde caminar, subir escaleras, ir al baño, bañarse o vestirse.
La depresión es un problema que se presenta con mucha frecuencia, se calcula que hasta el 60% de los pacientes candidatos a una cirugía bariátrica, muestran algún rasgo de depresión. Se sabe que una persona con obesidad extrema es cinco veces más propensa a presentar depresión mayor.
Estos cambios positivos en la calidad de vida pueden durar por varios años, y son superiores cuando se le compara con dieta solamente o con ingesta de medicamentos. Normalmente las personas que reportan cambios positivos en su calidad de vida, mencionan que tienen mucha más actividad que antes, y que su vitalidad en general ha aumentado significativamente.
También está descrito que la capacidad mental mejora, debido a que con la pérdida de peso el paciente duerme mejor y deja de roncar (problema conocido como apnea obstructiva del sueño), y esto se ve reflejado en un mejor desempeño laboral y una satisfacción en general aumentada.
Así mismo, hay muchos artículos en la literatura médica que relatan el hecho de un aumento en la satisfacción de su imagen corporal, que es la percepción, pensamientos y los sentimientos que tiene una persona hacia sí misma.
Otro ámbito que vale la pena resaltar, es la función sexual. En general, se considera que la obesidad puede representar un detrimento en la función sexual adecuada. Dichos problemas parecen ser mas frecuentes en mujeres que en hombres. Las mujeres con obesidad frecuentemente manifiestan disminución del apetito sexual así como alteraciones en su ciclo menstrual. En los varones con obesidad puede haber disfunción eréctil. Muchas veces estos problemas van acompañados de trastornos orgánicos como diabetes mellitus e hipertensión arterial. Indudablemente también la depresión puede jugar un papel importante en el paciente con obesidad y disfunción sexual. Hay estudios que apuntan a que una pérdida de peso de al menos 15 kg en los pacientes con obesidad, mejoran significativamente la líbido sexual en hombres y mujeres, y la disfunción eréctil en hombres.
Vale la pena considerar la opción de la Cirugía para Control de Obesidad. Hasta aquí nuestro artículo. Esperemos te haya gustado.
Vive Sano
Cirujano Bariatra Certificado por el Colegio Mexicano de Cirugía de Obesidad y Enfermedades Metabólicas (CMCOEM).