Después de la cirugía, solo puede consumir líquidos durante los primeros 14 días. Durante este periodo de tiempo se le exhorta al paciente para que agregue proteínas líquidas hidrolizadas tomadas para prevenir las pérdidas del tejido muscular. Luego comienza la fase de dieta blanda, en donde puede comer purés, batidos y papillas .
Si consume los alimentos incorrectos, puede afectar negativamente las posibilidades de bajar de peso o podría enfermarse.
Ejemplos de lo anterior:
Si se ha sometido a un bypass gástrico y consume alimentos con un alto índice de azúcar después de la cirugía, podría tener un problema llamado “síndrome de dumping”. El síndrome de dumping le produce malestar estomacal y mareos. También puede ocasionarle temblores, sudoración, enrojecimiento y sensación de calor (especialmente en la cara), y puede producir diarrea.
Si el paciente consume sólidos antes de lo permitido, puede favorecer a que las engrapadoras utilizadas en la cirugía no funcionen adecuadamente, y predisponer a una fuga.
Si come con mucha rapidez, particularmente los alimentos ricos en proteína, el paciente puede sentir molestas al pasar los alimentos, inclusive devolver el bocado antes masticado.
Para evitar estos problemas y aumentar las posibilidades de bajar de peso, debe:
Es posible que descubra que no le gustan alimentos que antes sí le gustaban, como la carne, o que ahora le gustan alimentos que antes no le gustaban, como las frutas y las verduras.
Es frecuente que los pacientes desarrollen mas sensibilidad de sus papilas gustativas, y se darán cuenta que perciben con mas intensidad los alimentos dulces o los salados, lo que fomentará a limitar su porción.
Cirujano Bariatra Certificado por el Colegio Mexicano de Cirugía de Obesidad y Enfermedades Metabólicas (CMCOEM).